Vi esta receta en Directo al Paladar, lo primero que me convenció fue la palabra "crujiente", eso ya me sonó muy bien. Además tenía un paquete de harina de garbanzos ya abierto en la despensa. Mis pequeños cambios han sido cambiar las semillas de amapola por las de lino y en vez de zaatar he puesto una mezcla de zumaque y orégano.
El zaatar es una mezcla de especias muy utilizada en la cocina de Oriente Medio, entre sus ingredientes lleva zumaque, tomillo y otras especias, a veces orégano.
El Zumaque es una especia también de Oriente Medio.
Si no encontráis estas especias podéis poner las que más os gusten.
Con estas cantidades salen entre 25 y 30 unidades, todo depende del tamaño que las hagáis.
Yo he hecho la mitad de las cantidades que os pongo, me han salido 14, era por probar, las repetiré estas fiestas para acompañar algún paté vegetal. Son aptas para dietas sin gluten y también para veganos. Si las van a comer celiacos tened cuidado con la contaminación cruzada. Hemos de tener los utensilios y zona de trabajo libre de productos que contengan gluten y al servirlos en la mesa bien separado de los alimentos con gluten.
INGREDIENTES:
- 120 grs. de harina de garbanzos
- 4 grs. de sal
- 1 cucharada de zumaque y orégano
- 1/2 cucharadita de semillas de lino
- 1/2 cucharadita de semillas de sésamo
- 1/2 cucharadita de cúrcuma molida
- 15 ml. de aove
- 60 ml. de agua
PREPARACIÓN:
Mezclamos la harina de garbanzos con la sal, las especias y las semillas. Añadimos el aceite y el agua. Amasamos. Ha de quedar una masa húmeda, pero que no se nos pegue a los dedos. Si es necesario se puede añadir un poco más de agua.
Envolvemos la masa en film y dejamos reposar a temperatura ambiente de 10 a 15 minutos.
Precalentamos el horno a 170º.
Sobre el film en que estaba envuelta o en papel de horno estiramos la masa con el rodillo que quede bien fina, de unos 3 mm. de grosor.
Cortamos de la forma que más nos guste y vamos colocando sobre la bandeja de horno forrada con papel de hornear. Pintamos la superficie con aceite.
Horneamos de 12 a 15 minutos, hasta que veamos que empiezan a dorarse por los extremos.
Dejamos enfriar sobre una rejilla y cuando se enfríe ya las podéis comer.
Espero que os animéis a hacer esta receta. Ya veis que es sencilla y no nos ocupa demasiado tiempo.
Tienen que estar buenisimos,un abrazo.
ResponderEliminarEsas especias no las conocía, seguro que tus galletitas han quedado divinas para comer solas y no dejar una.
ResponderEliminarUn besito
Ana, también tengo en casa un paquete de harina de garbanzo, así que no tengo excusa para no hacer tus crackers, porque lo de "crujiente" también me ha sonado muy bien
ResponderEliminarTe deseo una Feliz Navidad y te mando un abrazo bien bien bien fuertote!!!!!!!
Muy originales y seguro, a juzgar por los ingredientes, que tienen que estar muy ricas.
ResponderEliminarSaludos
No has tardado nada en convencerme uummmmmmmmm.
ResponderEliminarTe han quedado de relujo no lo siguiente ademas de estar de muerte relenta .
Te deseo tengas unas muy felices fiestas y un prospero 2018 !
Bicos mil wapa.
Buena pinta tienen y a mí también me llama que sean crujientes, jajaja.
ResponderEliminarTengo harina de garbanzos aunque tiempo muy poquito, hago un hueco.
Buena pasta con todo lo que me gusta. Besitos.
A mí me encantan las galletas saladas y me gustan mucho las tuyas. Las veo diferentes y si están crujientes, todavía me dan más ganas de probarlas.
ResponderEliminarBon Nadal, benvolguda Ana. Gaudeix tot el que pugues amb la teua familia.
Una besaeta forta.
A mi me pasa lo que a ti, eso de crujientes ya me atrae, su aspecto también y las lista de ingredientes aún más... no tienen gluten!
ResponderEliminarBicos guapa