ACELGAS DE COLORES

Las acelgas todavía en la planta

Las acelgas listas para llevar junto al resto de verduras

Mirad qué colorido!

Ya cocidas, todavía en la olla de vapor

En el plato con un chorro de un buen aceite

No vais a negarme que después de tanto dulce lo que necesitamos es un plato de verdura, pero claro con todo lo que hay en la red estos días poner un plato de acelgas verdes no os iba a apetecer, pero y si estas acelgas son de colores? Seguro que así la cosa cambia, os dejo las fotos para que veáis lo bonitas que son y además tienen un sabor muy suave, es la primera vez que las he comido, pero nos han encantado.
Empezaremos por el principio de la historia. Las acelgas son de La Tavella, una finca de 6 Hectáreas situada en Canovelles i Samalús (Barcelona) que se dedican al cultivo ecológico de algunas verduras y a la vez que recuperan la agricultura tradicional participan en un proyecto de integración socio-laboral de personas con discapacidad intelectual y/o enfermedad mental.
También disponen de productos que aunque no cultiven ellos son igualmente ecológicos y de proximidad. Por todos esos motivos cuando comes una de estas verduras el sabor que percibes es el auténtico, sin artificios. Y para no perder nada de este sabor estas acelgas las hice al vapor con unas patatas y las serví con un chorrito de aceite. Normalmente suelo añadir un ajo crudo troceado, pero esta vez no lo hice.
Desde La Tavella me invitaron a visitarlos para ver la finca y poder recoger algunas verduras, en la caja de la foto podéis ver una muestra de lo que me traje, todo recién cogido.
Agradezco al personal que nos atendió su amabilidad y explicaciones, siempre se aprenden cosas nuevas. 
Podéis pasar por su web para ver todo detalladamente.


INGREDIENTES:

• acelgas de colores
• patatas
• aceite de oliva virgen extra

PREPARACIÓN:


Limpiar y cortar las acelgas en trozos.
Pelar, lavar y trocear las patatas.
Podéis hervirlo con agua y sal, pero mi consejo es hacerlo al vapor, el sabor se conserva mucho mejor y no queda tan aguado.
Servir con un chorro de un buen aceite por encima.
Más fácil imposible y vuestro cuerpo os lo agradecerá.