Y como despedida hasta después de Semana Santa, una rica tarta de queso, en esta ocasión con fresones, la hice para el Día del Padre y aunque al principio dudaba un poco sobre como iba a quedar, he de decir que nos encantó tanto el sabor como la textura. La receta es del periódico digital Vilaweb, he puesto menos azúcar, a estas cantidades de ingredientes le ponían 80 grs. de azúcar, yo he puesto 65 y para nosotros no necesita más. Salieron 8 raciones, pero como no nos podemos juntar tanta gente lo que sobró fue para el día siguiente. Y seguía estando igual de rica o más.
INGREDIENTES:
- 125 grs. de queso crema
- 125 grs. de mascarpone
- 1 yogur natural
- 3 quesitos
- 3 huevos
- 65 grs. de azúcar
- 40 grs. de Maizena
- 12 fresones
PREPARACIÓN:
Lavamos y secamos los fresones quitando las hojas. Trituramos 8 de los fresones reservando 4 para adornar.
Batimos los quesos (queso crema, Mascarpone y quesitos).
Batimos los huevos con el azúcar.
Mezclamos los quesos con el yogur y la Maizena. Batimos. Añadimos la mezcla de los huevos con el azúcar y después los fresones triturados. Queda un color rosa bonito que luego se pierde al cocinarlo.
Forramos el molde de 20 cms. de diámetro (desmontable) con papel de hornear y vertemos la mezcla en su interior.
Precalentamos el horno a 170º, calor arriba y abajo y cocinamos hasta que al pinchar en el centro con una brocheta o palillo salga seco, serán algo más de 30 minutos.
Dejamos que enfríe y reservamos en la nevera para que quede bien cuajado.
A la hora de servirlo, sacamos del molde y lo adornamos con el resto de los fresones troceados, le he dado forma de corazón, pero también se puede adornar con los fresones partidos por la mitad.
Ya veréis qué delicia!
Feliz Semana Santa aunque no salgáis!