Llega el fin de semana y nos gusta acompañar las comidas con un rico postre, ahora apetecen fresquitos, aunque una panna cotta es ideal para cualquier época del año.
La de hoy es perfecta para veganos o personas que no puedan tomar lácteos.
En la receta original que vi en el blog Cucino per Passione la nata era de soja, yo la puse de almendras.
Los frutos rojos quedan muy bien con las panna cotta, pero sabemos que manchan mucho, si os cae un poco de salsa sobre el mármol, la recogéis con un trozo de rollo de cocina de Renova para no tener que lavar trapos luego. Y la de servilletas o pañuelos que nos ahorramos de tener que lavar y frotar sus manchas si usamos los de papel, todo ello lo encontramos con diferentes estampados y colores, muy moderno y bonito.
INGREDIENTES: (2 personas)
- 200 grs. de nata de almendras
- esencia de vainilla
- 1 cucharada de azúcar
- 1 cucharadita de agar-agar
- 100 grs. de frutos del bosque + 1 cucharada de azúcar
PREPARACIÓN:
Mezclamos en un cazo la nata de almendras, un chorrito de esencia de vainilla y el azúcar. Ponemos al fuego y cuando hierva añadimos el agar-agar y cocinamos 3 minutos removiendo constantemente.
Vertemos en moldes y dejamos enfriar a temperatura ambiente 1 hora.
Reservamos en la nevera unas horas hasta que cuaje.
Mezclamos los frutos rojos con el azúcar y reservamos en la nevera.
Para servirla desmoldamos la panna-cotta y cubrimos con los frutos rojos y el zumo que sueltan de su maceración con el azúcar.
Personalmente me gusta más la textura con las hojas de gelatina, pero si lo han de comer veganos hay que hacerlo con el agar-agar.
Buen fin de semana!!